TRES POEMAS DE MARÍA AUXILIADORA ÁLVAREZ




PÁRAMO SOLO

páramo solo
mi madre va para allá
y va sola
páramo solo
mi madre también va sola
recíbemela bien
páramo solo
conversen los dos
convérsale tu
páramo solo
ella está acostumbrada a escuchar
si ella se pone en su silencio
está esperando que le hablen
páramo solo
mi sola te escucha

cielo solo del páramo
mi madre va para allá
cielo solo
mi madre también va sola
recíbemela bien
cielo solo
conversen los dos
convérsale tú
cielo solo
ella está acostumbrada a escuchar
si ella se pone en su silencio
cielo solo
así es mi madre
y va para allá
va sola
cielo solo
ella va

brisa sola del páramo
aire de ella
aire de mi madre
mi sola te escucha
no hace sino escucharte
brisa
si usted eres la esposa del viento
eres como mi madre
la sola del páramo
la solita
la yo

frío del páramo
mi madre va para allá
ya sabes lo que pienso de ella
y lo que ella piensa de hablar
escuchar es lo que le gusta
escuchar se hizo ella
de puro gusto escuchar
frío
tú le vas diciendo y diciendo
y entrando y entrando
y vuelta y vuelta
la misma cosa
la cosa de tu dolor
tu soledad como la de ella
la de mi madre
la sola del frío
la igual

páramo
tú eres una alta montaña
blanca en la cima
y de suave luz
tú eres
lo que necesitan
mi ella y mi él
para descansar
mi él ha muerto
mi él era nuestro
mi él era de ella
de otra forma era mío
que yo me parezco
que yo soy él

ella dice
te tengo
un pedacito de él
su pie
digo yo
su aliento
dime algo
me dice
no sé
lo que me preguntas
no sé
las respuestas
cosas distintas
no sé

no importa
me dice
por decir
es para que hables
para oír algo
dime algo
por sencillo que sea
por banal
dime algo
que estoy acostumbrada
a escuchar

a ver si la distancia conversa
por si yo no voy a estar
por si no converso
aunque esté
mi sola
por si no converso
el páramo te va a hablar



LA NOCHE DE LA TRISTEZA

y como dijo que vendría
yo pasé la noche esperando
y como dijo que vendría
yo amanecí con el sol
tan alta como la mañana
insomne y tranquila
como el rocío

cuando yo abrazaba a mi padre
volvía su infancia
e incluso los pájaros
volaban alrededor
cuando mi padre me abrazaba
volvía mi infancia
e incluso los pájaros
comían alrededor

cuando mi padre no está
como ahora
yo abrazo el aire
mis brazos abrazan solos
abrazan pájaros a lo lejos
abrazan aire de pájaros lejos
abrazan la memoria
reciente y tibia
abraza real
la imaginada

cuando mi padre no está
como ahora
cuando yo lo abrazo en el aire
yo miro en mi mente
un potrero al amanecer
yo respiro un aroma
de yeguas jóvenes
como mis hijas
néctar de hierbas
y pastos recién cortados

cuando yo camino
en el aire de la mañana
en el potrero de mi mente
yo veo retozar su juego
de padrote en el abrevadero
y mi color de caballo
se parece al suyo
en horizonte de inmensidad

cuando yo abrazo el aire
yo hundo mi rostro en lo invisible
para ser su abrevadero
yo quisiera ser su río
si su sed de agua necesitara
su sed de pájaro en la mañana
su sed de lluvia que soy

cuando aparecen en mi mente
las faenas de este potrero
que amanece
yo veo
carretas y carretas
de trigo recién lavado
y ramas multicolores recolectadas

cantos en las haciendas
del pensamiento
padre de mí:
¿cómo voy a llorar
entre el olor del café
y las blancas camisas
de los trabajadores?
yo soy una blanca camisa
trabajadora
¿cómo voy a olor otra cosa
que no sea el mastranto
de este amor
sus cafetales
y la maleza de la caña
en el trapiche?

¿dónde están las faldas de colores?
¿estás viendo que está amaneciendo
en el río?
y es raro que mi hijo
no haya salido a bailar
¿quién bailará en la rueda vacía?
¿a qué tantos aplausos
y ritmos de tambor
en el sudor de la lengua?

¿será que de lo lejos viene un aviso?
¿una polvareda reconocida?
¿un rozar de cascos entre sí?
¿un tumulto de recordación en el aire?
¿en el aire vacío entre los brazos?
¿en el aire de más lejos?

la tierra inicia su caravana en la noche
la tierra se va arriando a sí misma
para llegar al amanecer
para llegar a la hora de la siembra

¿dónde estuvo la noche
cuando no hubo noche?
¿cuando se incendió el incendio?
¿cuando se inundó la inundación?
¿cuando se murió la hija de la tristeza?
¿cuando se murió el padre del amor?
el capataz del río
el señor de las haciendas
en el pensamiento
el remolino de trigo
¿dónde fue a parar?

se detuvo en la noche de la tristeza
no se trabaja en la tristeza
como en domingo
dulce amor
no se levanta el cuerpo
nadie espera que crezca nada
de la entera devastación

a no ser el abrazo del aire
y entonces el aire es poco
y el aire es mucho
y el aire es tanto
que lleva y trae establos enteros
en vuelo
y animales inmensos y sudorosos
como estampidas de nubes

cuando el abrazo
está lleno de aire
de aire entero
en circunferencia exacta
levanta la mañana finalmente
de caballo ahíto de río
volando en crines
en señorío de potrero
y horizonte de heredad



UN HOMBRE POBRE

Se oye una lengua muerta: paraké
[…]
graznidos carniceros:
pa-ra-qué pa-ra-qué pa-ra-qué

Gabriel Zaid


un hombre pobre
no tiene recuerdos nuevos
porque un hombre pobre no tiene memoria
donde guardarlos

un hombre pobre cavila
con su mente vacía:
¿dónde se fue mi río de agua dulce?
¿dónde mi amanecer?
mi semilla en la desazón del viento
se perdió hacia arriba
se perdió

un hombre pobre
no sabe el tiempo:
¿cuánto dura?
¿dónde está?
¿dónde empezó la muerte
entrando en un pastizal?
desmemoria delgada
silenciosa
ahuecándose en el surco
de la agüita de beber

un hombre pobre
no tiene mañana
¿cuál sueño ha de soñar?
si sus pájaros se van
él sabe que se van
perdidas las noches en cavilar
se van

un hombre pobre
no puede soñar hacia ayer
la inundación se llevó todo
y la sequía del fuego que arrasó
¿dónde están las piedritas
que juntábamos?
¿dónde están?
los dedos que juntábamos
¿dónde están?

un hombre pobre
no tiene dedos en su mente vacía
los pájaros nacieron para volar
¿dónde están los dedos?
los dedos se van
él sabe que se van

un hombre pobre no tiene lugar
nada hay más inseguro que un lugar
la segunda vez que se repite
ya el lugar no está
ayer no es el lugar que estaba hoy
¿para qué sembrar?
si viene una pura tempestad
y borra lo que se había escrito
con el azadón
y lo escrito no decía nada
era sólo gesto
y gesticular

un hombre pobre
no puede hablar
¿para qué hablar?
nada hay más tranquilo
que el silencio
en la mente vacía
el silencio duerme
y cuando se duerme no se piensa
pensar es gastar silencio
y un hombre pobre no tiene con qué

un hombre pobre cavila
y la cavilación piensa por él:
¿y el riíto por fin en la cabeza?
¿y el riíto por fin?
¿y lo que estaba de luz que había?
¿qué fue?
¿y el hambre y la comida?
¿qué fue?
¿y la sed del qué fue?

el Quefue era un pájaro
el principal
todos fueron fueron principales
pero el Quefue cantaba más
eso era un puro sonido a toda hora
mucho se oía entonces
la pregunta del Quefue
su música era una pregunta larguísima
una cantata ininterrumpida
era el asombro del Quefue
luego su ausencia

un hombre pobre
no se sorprende de nada
tanto le da dormir en el agua
hasta que se va haciendo un charco
a su alrededor
un charco de río improvisado
⎯improvisado no es río de verdad⎯
con lágrimas de hombre
que no sabe que está llorando
él mismo está haciendo su río
su río que se le perdió
pero él cree que es el agua sola
el agua de pasar

un hombre pobre
puede hasta comer mosquitos
o cosas así
porque se le queda la boca abierta
y recibe lo que entra
¿qué más?
si es una brizna de algo
si vive la brizna
¿qué más?
si es un pelito de pluma
¿qué más?
si al fin te acordaste
de mí

Quemás era el más callado
de todos los pájaros
ni parecía pájaro
de esos que se van
Quemás se dejaba ir
en la pura contemplación
sin mirar nunca
porque Quemás sabía
que un momento se sumaba al otro
sin ninguna diferencia
y sin agregar nada a la conversación
Quemás no conversaba por eso
⎯véase cantar⎯
el acontecer era uno solo
un sumarse
nada sobre nada
y así esperar

Quemás hilaba el aire
y esperaba el sucederse
ajeno al fin
se fue sin quedarse
se quedó sin irse
tal cual era lo mismo
Quemás dijo así
sin decir para qué

Paraqué fue una desgracia de pájaro
un búho que miró de día
un gavilán más oscuro que otro
quizá cuervo
algo horrible que no volaba
Paraqué se acostó
sobre los otros
y no hubo forma
de mover al Paraqué

cuando un hombre pobre
trata de recordar
su memoria
es un montón indiferenciado
del mismo color sin movimiento

un hombre pobre
no quiere ordenar lo perdido
ni hacer un nuevo perdido
si lo perdido se va
para eso tiene con qué
lo perdido se entiesa primero
y desciende hacia abajo
después
o asciende de lado y se va
sin decir adiós ni explicar
para eso lo perdido
tiene con qué

Conqué era el más poderoso
Quizá Conqué fue el principal
todos fueron principales
pero Conqué tenía el poder de todo
⎯poder del verbo poder⎯
podía decir basta
y decir se acabó
podía borrar con su cuerpo
lo que vendría adelante
y lo que vendría atrás
no tenía más que zambullirse en el aire
y zas
ya no había nada
sólo Conqué
Conqué llegó a ser el pavor del cielo
el cielo pequeño del mismo lugar
los lugares pequeños
tienen reyes pequeños
pero reyes al fin

Alfín fue el último
como cabe decir
más dulce
y más inteligente
vino después de sin qué

Sinqué era el más pequeño
y era completamente transparente
Sinqué era el más protegido
porque nunca se veía
ni tenía boca por razón de pico
ni tenía cabeza ni cuerpo
ni aquello ni plumas
ni nada
ni era pájaro ni era nada

Sinqué llegó a no existir
era en realidad una sombra
y no sólo una sombra sola
era la sombra del aire
la sombra del árbol donde estuvo
la sombra de las huellas
más abajo de las huellas
la sombra de la hojita sola
más abajo de la sola
la sombra de la memoria
de la nada

un hombre pobre cavila
con su mente vacía
y con su sombra
según el sol de la noche

a Alfín también le decían Elfín
uno tiene de descanso
y otro tiene de perdón







María Auxiliadora Álvarez
Tomados de El amor de los enfermos
Mantis Editores, 2017

Comentarios